Ser de izquierda es poner a la gente en el centro del sistema
Conversamos con la diputada por la France insoumise, Muriel Ressiguier, de Montpellier, sobre la difícil situación política en Perú, abordando temas adjuntos, como la desinformación, el «terruqueo» mediático y la función de las ideas de izquierda en la conformación definitiva del mapa político europeo.
Una producción de Europa Latina TV
Entrevista: Rubén Romero / Traducción: Kira Madueño
ESTIGMATIZACION Y ESTRATEGIAS
Rubén Romero: Quise invitarla ya que usted se siente muy concernida por un tema que para nosotros es de suma importancia. Como le dije por correo electrónico, se están llevando a cabo actualmente, en el Perú, las elecciones presidenciales y todas las proposiciones de la izquierda han sido reprimidas por la prensa ya que la prensa en América latina, especialmente en Colombia, en Perú y en Brasil tienen una tendencia a decir que todas las proposiciones de izquierda conducen a extremos como al comunismo. Y la palabra clave es «Venezuela»
Muriel Ressiguier: Sí, sus palabras me recuerdan muchas cosas, en realidad, es un poco parecido en Francia donde los valores de izquierda han bajado bastante en la opinión pública, en gran parte, a causa de la misma izquierda que ha saboteado un poco sus valores humanistas y ahora se burlan mucho de nosotros. Usted habla de Venezuela, mi movimiento La France Insoumise es continuamente estigmatizada: relacionan sistemáticamente La France Insoumise a Venezuela porque cuando proponemos algo que sale del ultra liberalismo u otro escogimiento de sociedad, o bien se es un dulce soñador o bien eres un loco peligroso y un extremista. Efectivamente, lo que usted dice hace resonancia.
Rubén Romero: Entonces, Hay todavía evidentemente objetivos políticos claros detrás de todas esos malentendidos escuchados en la prensa ¿Qué piensa usted que hay detrás de toda esta campaña de estigmatización?
Muriel Ressiguier: El miedo, pienso yo, de ver que las ideas que la izquierda defiende lleguen algún día al poder habiendo llegado a ser mayoritaria en el país e impida muchas cosas, porque mientras que se hable de una izquierda “caviar” que se entiende bien con el liberalismo y lanza algunas medidas sociales, no hay problema; pero cuando se quiere transformar la sociedad, y, por lo que he visto, mediante los documentos que usted me hizo llegar y que otros camaradas me transmitieron más lo que he podido obtener yo misma, es lo que propone Pedro Castillo en el Perú. Es decir, una transformación de la sociedad en ruptura con ciertos valores liberales. En Francia, cuando se defiende eso y es lo que yo también defiendo quiere decir claramente que por un lado hay el dinero en valor absoluto, es el mundo liberal, y por otro lado hay lo humano. Yo entré a la política, realmente, en un partido que tenía como eslogan l’Humain d’abord» (Primero el humano). Evidentemente, hay miedo entre los que dirigen y que están acostumbrados a hacer negocios entre ellos, los que están acostumbrados a repartirse el mundo, a repartirse las empresas y el dinero como les plazca, miedo que surja un pueblo que diga: !Cuidado! el dinero no es el valor absoluto. Estamos saqueando el planeta, nos estamos matando entre seres humanos, estamos privándonos de valores que son bienes comunes esenciales como el agua, estamos socavando la educación que es la clave de la emancipación humana etc. etc. Se destruyen los bosques! Eso les da miedo porque su valor es el dinero, eso es lo único que ven. Entonces les es necesario que la gente les obedezca y sobre todo que no se emancipen a nivel de la conciencia política. Para eso, hay algo extremadamente fácil cuando tienes los medios y cuando se ocupan puestos claves y puestos de conocimiento… Es la propaganda. El viejo truco de estigmatizar para causar miedo. Nosotros, en 1981 cuando François Mitterrand llegó al poder, después de muchos años de gobierno de derecha en Francia; y, sin embargo, (él fue realmente de izquierda poco tiempo; después hubo el giro del rigor) la gente estaba completamente asustada, decían el comunismo llega, los rojos llegan, nos van a quitar nuestras casas, van a venir a nuestras casas… Pues no fue así en absoluto: hubo algunas medidas sociales fuertes, yo pienso en el fin de la pena de muerte, han habido cosas que se establecieron, pienso en el RMI (Ingreso mínimo de inserción) etc, símbolos fuertes. Pero la tierra no se derrumbó. La gente continuó a hacer negocios etc. En realidad, se dieron cuenta que lo que se les contaba respecto a la llegada de Mitterrand al poder era completamente falso.
«Con relación a lo que usted me dice que pasa en Perú, es decir, esa manera de estigmatizar, de inventar miedos en la gente y llevarlos a lo que no son, cuando se repite algo varias veces, eso termina en las cabezas de algunos como una verdad. Es una manipulación, una propaganda que es extremadamente peligrosa porque es eficaz en algunas personas que no tienen, justamente, una formación política fuerte y las palabras terminan por entrar en la gente y ellos lo creen todo…Y dicen: «Es cierto, los comunistas… de todas maneras una política realmente de izquierda no puede tener lugar, es pura ideología», como si el capitalismo y el ultra liberalismo fueran un dato económico, social que no se pudiese cambiar, como si estuviesen así, caídos del cielo y que no pudiéramos vivir de otra manera».
(Cuando François Mitterrand llegó al poder) … la gente estaba completamente asustada, decían el comunismo llega, los rojos llegan, nos van a quitar nuestras casas, van a venir a nuestras casas… Pues no fue así en absoluto: hubo algunas medidas sociales fuertes, el fin de la pena de muerte, cosas que se establecieron, el RMI (Ingreso mínimo de inserción) etc, símbolos fuertes. Pero la tierra no se derrumbó. La gente continuó a hacer negocios etc. En realidad, se dieron cuenta que lo que se les contaba respecto a la llegada de Mitterrand al poder era completamente falso.
Exelente comentario, muy comparativo con la realidad coyuntural Peruana.