Alejándose de la codicia española los últimos Incas se instalaron en los valles de Vilcabamba e Incahuasi, inaugurando un ramo de leyendas que siglos después todavía marcan la rutina de los agricultores del Cusco. 500 años pasaron, y el café, ese entrañable grano africano, fue adoptado y criado con el suave sonido del quechua, por los descendientes del imperio que iluminó con su ingeniería a toda Sudamérica. Es el inicio de la historia del Geisha Inca de Incahuasi
Los fértiles valles de tierra generosa que ya identificaron los pre peruanos antes de la conquista, fueron la cuna, jardín, primaria y secundaria de los cafetaleros incahuasinos del siglo 20. Con el paso del tiempo se les unieron andahuaylinos, apurimeños y ayacuchanos. Juntos aprendieron a domesticar las variedades oriundas de Etiopía. Geishas, Típicas, Borbones y Caturras habían encontrado un hogar, con sombras de pacae y vientos que llegan de los apus cercanos: Apu Chuquisafra, Apu Chuntahuilca.
Deidades adornadas de nubes, las montañas que presiden los cafetales de los valles de Incahuasi con sigilo representan la mitología incaica y forman parte integral del proceso productivo en los cafetales.
El homenaje que se les rinde es parte de la siembra y de la cosecha.
Aquí, con el sol cotidiano y la tibia despedida de las tardes, se desarrolla una de las caficulturas de excelencia en el mundo. Y no se trata de la industria productivista empeñada a la exportación; tampoco se trata de una iniciativa ligada a multinacionales caritativas. No. La calidad de los cafés de productores como Julio César Chávez Nieve, Hugo Mariño Laura, Lucio Luque Vasquez, Albino Ibias e Hilda Leguía se debe a la lealtad que le rinden a sus tradiciones.
Cada familia incahuasina contribuye a la cosecha selectiva que se organiza de manera equitativa en las fincas del distrito, «tal y como se solían hacer las faenas en tiempos de nuestros ancestros, los Incas» nos confiesa la familia de Hugo Mariño. Los Mariño obtuvieron el segundo puesto de la Taza de Excelencia 2021 y desde hace varios años ocupan los primeros puestos en las competiciones más importantes de los concursos de cafés de especialidad. Siempre aplicando la metodología ancestral propia a la cosmovisión incaica.
Resultado: las técnicas del mundo pre hispánico continúan vigentes y altamente competitivas en la realidad globalizada de la exacerbada competitividad que impone el capitalismo voraz y salvaje.
Por su proximidad, Incahuasi tiene sede en Andahuaylas. En el laboratorio de la Cooperativa se entrenan y capacitan los hijos de los socios. Claudio Ortiz, gerente de la cooperativa, insiste y profundiza estos trabajos de capacitación para que la generación de jóvenes incahuasinos asuman la parte técnica ya familiarizados con los estándares del mercado: «Queremos que nuestros asociados estén preparados para recibir a los tostadores, catadores y compradores de varios lugares del mundo». Nos cuenta Claudio mientras asiste a la cata.
El grupo de catadores, Q graders como Saulo Ivias, Henry Chávez, Kelly Vilchez, y expertos en Q processing John Saenz, William Muriel Arias comprenden la complejidad de los cafés porque son oriundos de las fincas que lo producen. Por esta razón identifican los sabores de las moras, sacha tomates, paltos y otras frutas que los acompañan en el campo. Y que no forman parte de los parámetros organolépticos definidos por la SCA.
En palabras de Justin Miles, reconocido catador australiano residente en Berlín,
“el éxito de la Cooperativa Incahuasi reside en la metodología, y sobre todo en el marcado aspecto cultural que influye en la producción de los cafés. Los puntajes en taza son resultado del respeto a la Pacha Mama, que nos importa ayudar a preservar”.
La productividad de los valles soleados también causa admiración en los profesionales del café
“los pisos y climas de la zona se benefician de las montañas, generan zonas con caída de sol atenuada y cambios de temperatura que protegen a los cafetos. Además, no hay signos de depredación de bosques y el río se mantiene limpio”, explica el Ingeniero Rover Saccaco, originario de Villa Rica, gran conocedor de los cafetales del Perú.
Además del Ayni, la Minka y la espiritualidad propia a las comunidades, las fincas de Incahuasi se construyen respetando la ingeniería incaica: andenes y terrazas rodean y protegen a los cafetos condicionando su desarrollo en armonía con la topografía original.
Incahuasi fue creada en el 2005, y desarrolla un modelo cooperativista que además de Cusco, le permite incorporar a agricultores de Apurímac y Ayacucho. Hoy cuentan con más de 500 socios, muchos de ellos en vías de capacitarse, otros ya profesionalizados. El reconocimiento a sus cafés se debe a que ocupan los mejores lugares en las últimas ediciones de la Taza de Excelencia. Y su credibilidad internacional se confirma al obtener el primer puesto de la categoría Pequeños Productores SPP (sello de pequeños productores) en el World Of Coffee 2022 en Milán.
Los cafetaleros nos cuentan con orgullo de estos premios, mientras probamos en Aeropress, además de su propia cosecha, algunos cafés de Etiopía y Guatemala. El café es parte de la rutina, conversación y mitología local. La sonrisa de los socios de Incahuasi compartiendo (picchando) de su pequeña producción de coca, -apenas el 10% de los cultivos existentes- nos hacen comprender que la caficultura determina gran parte de la economía local, y es causa de una envidiable progresión en la diversificación y erradicación de cultivos conflictivos.
Curiosamente, las instituciones destinadas a mejorar la producción y la promoción del café o a generar proyectos de “cultivos alternativos” a la hoja de coca, por aquí nunca pasaron, lo cual pone en evidencia la eficacidad de muchos presupuestos interpretados desde la burocracia limeña y su miopía urbana.
Los socios de Incahuasi producen uno de los mejores cafés del mundo. El Perú es uno de los principales productores de café orgánico del planeta, y existe gran demanda de café peruano en Europa, Asia y Estados Unidos. 
Paradójicamente, la producción de Incahuasi, esos sacos de gran calidad que atraen a catadores del mundo entero, se trasladan por caminos de penosa transitabilidad, bordeando cerros en subidas y bajadas de hermosos paisajes pero de difícil acceso.
Condiciones que definen la calidad de vida, de trabajo y de autoestima que dificultan aún más el oficio de los cafetaleros del siglo 21, acostumbrados a hacer tramos de apenas 193 kms en 8 largas horas, como si aún viviéramos en la colonia…
- Premios INCAHUASI
- 2do Lugar Taza de Excelencia 2022 – socio Julio César Chávez Nieve
Año 2022
1er premio al mejor Café en los «Premios Café SPP 2022», en el evento WOC Milán, Italia
Año 2020
Primer lugar en la IV COMPETENCIA TAZA DE EXCELENCIA PERÚ 2020, premio al mejor café a nivel nacional.
Año 2019
III Taza de Excelencia Perú; segundo lugar, obteniendo un puntaje en taza de 91.44 puntos. Este mismo año se participó en la Feria SCAA en Boston, EEUU; obteniendo el primer puesto al mejor café SPP.
Año 2018
Premio al mejor café a nivel nacional, en la Expo Alimentaria Lima.
Año 2017
I Taza de Excelencia Perú; finalista con 3 participantes entre los 10 mejores café a nivel nacional.
Año 2014
Primer puesto en el concurso regional de cafés de calidad, organizado por PROM Perú en la ciudad de Cusco, obteniendo un puntaje en taza de 89.0 puntos.
Año 2013
Se ocupó el primer puesto en el concurso regional de cafés de calidad, organizado por PROM Perú en la ciudad de Cusco, obteniendo un puntaje en taza de 88.3 puntos.
es interesante el microclima que tiene el valle de incahuasi, es gracias al nevado choqesafra (el apu) que le hace especial y único, así mismo el café de incahuasi tiene su peculiaridad y perfil único apreciado por tostadores reconocidos. felicitaciones Rubén por tu labor y el artículo publicado
Ruben te felicito que buen trabajo realizado en este reportaje, muy interesante el enfoque de equidad que das a los agricultores de Incahuasi y creo yo personalmente ese es el paso mas importante que se debe dar para que una organización para que se cimienten fuertes bases para su desarrollo e inclusión en los mercados especiales. Un fuerte abrazo y que siga los éxitos.